Ha destacado que la monja solo era "una pieza" de un entramado mucho más complejo que implica a más gente. "Sor María fue la cabeza de turco", ha reseñado
La presidenta de SOS Bebés Robados, Mª Cruz Rodrigo Hernández, ha asegurado que la monja María Gómez Valvueba, conocida como 'Sor María', tenía que haber hablado antes de morir para "tener la conciencia tranquila".
Así lo ha manifestado Rodrigo, quien ha reconocido que su fallecimiento le ha dado "mucha rabia". "No vamos a parar de luchar. Nadie se cree que una religiosa hiciera ella sola este estropicio", ha insistido.
Por ahora, la monja estaba imputada en dos casos. Uno de ellos por la desaparición de dos gemelas en la clínica Santa Cristina en 1981 y el otro por la desaparición de una niña en marzo de 1982. En este último caso, la madre se reencontró con su hija casi 30 años después gracias a un programa de televisión.
