Lo recuerdo como si fuera hoy. “¡¡El que no salta es un inglés!!”, cantábamos dando saltitos, acalorados aún a pesar de los 3 grados centígrados que caían impíos sobre la Costa Atlántica.
Vázquez Montalbán supo ver ya a comienzos de este siglo XXI que el fútbol “ha perdido la lógica interna inicial que le acompañó hasta los años 70 y cada vez se acerca más a la condición de droga de…