Los Tobelhocker fueron castigados al destierro, al ostracismo y al rechazo social por haber protagonizado la caza de brujas, al denunciar y condenar a sus vecinos.
“ El gato de la bruja ” ilustrado por la pintora Díaz-Banda y publicado por Éride Ediciones, cuenta las aventuras de un travieso gatito llamado Trasto.
Los responsables del Centro Superior de Investigaciones Científicas vienen aplicando desde 2011 una política que sustituye empleo estable por precario.