sábado. 20.04.2024

Continúa la privatización sanitaria

Hay una gran inercia privatizadora que esta favorecida por la permanencia del PP en el gobierno central.

sanidad

Los medios de comunicación y las redes sociales imponen una lógica que se aparta en gran medida de la realidad y hace que las cuestiones, por importantes que sean, que pierden “actualidad informativa”  parezca que no existen. Eso es lo que sucede con la privatización sanitaria en nuestro país que aunque fue un fenómeno generalmente reconocido en 20112, cuando se produjeron las grandes movilizaciones en Madrid, luego ha pasado a ser un fenómeno“oculto”, pero no por ello menos real.

Y ello ha sido así primero porque la política de las administraciones públicas han optado por utilizar en la mayoría de los casos medios menos evidentes, mas silenciosos, de privatización (derivaciones a centros privados, aumentos de concertación, favorecer al sector privado por la vía del deterioro sistemático de los centros públicos, etc) , pero allí donde se ha continuado con la vía de la privatización directa como en Vigo la movilización social y profesional ha tenido grandes proporciones.

La realidad es que en estos años se ha continuado con un aumento de la privatización, en la provisión y en la financiación de nuestro sistema sanitario en general, especialmente importante a partir de 2009 (se ha pasado del 24,44% del gasto sanitario total en este año al 28,40% en 2013, según los datos de la OCDE) y también se han incrementado los conciertos, el aseguramiento privado y el gasto de bolsillo (lo que pagan los ciudadanos directamente para recibir asistencia sanitaria). Recientemente la FADSP ha publicado su  Tercer Informe sobre la privatización sanitaria de las CCAA (disponible en: Tercer Informe la Privatización Sanitaria de las CCAA 2016)  que realiza una clasificación de las mismas de acuerdo con el grado de privatización presente en sus servicios sanitarios, y que constata  que la privatización ha aumentado en todas las CCAA.

Los resultados de los 3 informes evidencian que las CCAA más privatizadas y las que lo están menos siendo básicamente las mismas. Los dos primeros puestos en los 3 informes están ocupados por Madrid y Cataluña seguidos por Baleares y Galicia alternándose en los puestos 3 y 4.  Asimismo Extremadura y Castilla La Mancha ocupan los 2 últimos puestos en los 3 informes. Algunas CCAA tienen  movimientos en la tabla, el más llamativo es el de Aragón que pasa del 6º puesto en 2014 al 12º en 2016 y también reseñar La Rioja que del 15º puesto pasa al 11º en el mismo periodo.

Los resultados reflejan mayoritariamente la situación previa a las últimas elecciones autonómicas y  poco o nada las modificaciones que se han realizado en las políticas sanitarias de  las CCAA en las que se han producido cambios de gobierno con contenidos más progresistas, las modificaciones que pudieran producirse no aparecerán al menos hasta dentro de un año, aunque de momento ha habido pocos cambios concretos, aunque si muchas declaraciones de intenciones que todavía están por concretarse ( Valencia, Baleares, etc), y que el resultado y las movimientos en la clasificación solo recogen la mayor o menor intensidad que ha alcanzado en cada comunidad autónoma en concreto.

En el fondo el resultado es especialmente preocupante porque hay una gran inercia privatizadora que esta favorecida por la permanencia del PP en el gobierno central. Seria deseable una actuación decidida y urgente de las administraciones sanitarias, a nivel central y autonómico, para devolver el sistema sanitario a la gestión publica, lo primero por supuesto es que la opinión pública sea consciente de que el problema no se ha solucionado sino que, antes al contrario, continúa agravándose.

Continúa la privatización sanitaria