sábado. 20.04.2024

Rajoy, Merkel, falsarios! Lo que hace falta es crear empleo

Todos hemos comprobado a qué nos lleva la política suicida del austericidio del Gobierno, que sigue el "diktat" de la falsa austeridad dictada por Merkel y sus epígonos de la Comisión Europea. El resultado es una economía y una sociedad hundidos en una profunda recesión que puede finalizar en una depresión sin salida.

Todos hemos comprobado a qué nos lleva la política suicida del austericidio del Gobierno, que sigue el "diktat" de la falsa austeridad dictada por Merkel y sus epígonos de la Comisión Europea. El resultado es una economía y una sociedad hundidos en una profunda recesión que puede finalizar en una depresión sin salida. Toda la política de recortes llevada a cabo, con el único objetivo de salvar a los bancos, ha supuesto pérdida de empleo, incremento de la precariedad, reducción de más de un 10% del salario real, recorte de los servicios públicos y del reducido estado del bienestar, menos consumo, menos producción, menos ingresos fiscales, etc. Todo ello sin que se vea ningún horizonte de esperanza de una posible recuperación, ni a medio ni a largo plazo, lo que supone un cruel sacrificio sin esperanza de futuro para el conjunto de la sociedad.

La política del PP, antes ya anticipada por ZP, concretada en la Reforma Constitucional que consagra el carácter prioritario de la lucha contra el déficit por encima de todo, nos está llevando a un suicidio social. Es evidente que a largo plazo se debe tratar de tener un déficit equilibrado, pero hacerlo de golpe, sin más consideración, conlleva ir al precipicio social.

Hoy en día hay, en el conjunto de la UE y especialmente en los países del sur, ante todo impulsar políticas de expansión que permitan la creación de empleo que es la base de cualquier recuperación económica y social. Hemos visto como hasta ahora todas las políticas han ido en la dirección incorrecta: desde la Reforma Laboral que sólo ha comportado más paro, precarización y pérdida de derechos sociales; los recortes de gasto en servicios públicos que han ido en el mismo sentido, más paro, precarización y pérdida de derechos sociales, hasta llegar finalmente a la Reforma de las pensiones, que vuelve a comportarse más pérdidas de derechos y peores condiciones y expectativas para los futuros y los actuales pensionistas.

Ninguna de las medidas tomadas por el Gobierno, a través de su práctica poco democrática del Decreto-Ley, ha supuesto ninguna mejora ni para la economía, ni para la sociedad. Y el único objetivo conseguido, el de la supuesta reforma del sistema financiero, no ha supuesto ninguna mejora en cuanto al hecho de hacer fluir el crédito hacia la economía productiva.

Rajoy y el PP, como la propia señora Merkel y los dirigentes europeos, en una dirección quiebra y que no tiene salida. Quizás el momento algunos, como Alemania salen beneficiados pero a medio plazo están poniendo las bases que conducen a la insignificancia económica y social de Europa y el desprestigio e incluso la ruptura del ideal de la Europa Unida.

Quizás habría que nuestros dirigentes, y el conjunto de los dirigentes europeos, giraran la vista hacia Estados Unidos, donde la política de Obama ha ido dirigida a potenciar el crecimiento y la creación de empleo como objetivo fundamental, y al parecer con mejores resultados que en la UE, a pesar de chocar con la resistencia de los republicanos.

La prioridad debe ser por encima de todo, VOLVER A CREAR EMPLEO, esta es la clave para salir de la crisis económica y social. Creando empleo y de calidad se mejora el conjunto del salario de la sociedad, lo que permite estimular el consumo, y por tanto la producción y la recaudación fiscal, y por lo tanto tenemos más ingresos del Estado para hacer frente al déficit. Es evidente que se necesitan más medidas, como una austeridad real que conlleve luchar contra el despilfarro de recursos, la potenciación de los servicios públicos, educación, sanidad, servicios sociales, pensiones, y eficiencia de las administraciones, una reforma equitativa de la fiscalidad que no grave sólo las rentas del trabajo sino las del capital, un impulso radical a la lucha contra el fraude fiscal, en especial de las rentas altas y los beneficios de las grandes empresas, al tiempo que se deben establecer medidas para hacer emerger el pozo de la economía sumergida que puede abarcar más del 25% del conjunto de nuestra economía.

Pero por encima de todo hay que poner el objetivo en crear empleo, para rebajar esta cifra del 26% de gente sin trabajo, y sin posibilidades de llevar una vida normal. Y para lograrlo con perspectivas de futuro hay que reivindicar el trabajo estable y de calidad que es el único que, junto con la formación y el gasto en I + D + i, nos puede garantizar llevar a cabo una economía competitiva que no dependa los sectores retardatarios basados en bajos salarios y trabajo precario como ha sido hasta ahora.

Hay que observar que el empleo es la solución, el UNICA SOLUCIÓN por el conjunto de los problemas, por que otras medidas como las llevadas hasta ahora no son alternativas y van en la dirección equivocada. Pongamos el ejemplo de las pensiones y las medidas adoptadas, una vez más sin diálogo, por el Gobierno Rajoy. Retrasar la edad de jubilación, endurecer las condiciones para acceder a todo tipo de jubilación sólo son parches que no solucionan el problema sino que lo esconden. Cabe recordar que el sistema público de pensiones, de solidaridad intergeneracional y de reparto, ha sido hasta ahora la más sólida garantía de nuestro sistema de pensiones. Mucho más que otros sistemas fracasados como los sistemas privados que están al azar del mercado bursátil. Es evidente que en el sistema de pensiones se pueden estudiar alternativas para mejorarlo, sea sobre los años de cotización, sobre el sistema de cálculo, etc., Y hasta ahora se han hecho cambios con consenso que la han mejorado. Pero la reforma actual del PP no supone ningún cambio para mejorar, rompe el consenso y no soluciona los problemas del sistema. Básicamente por que Rajoy y el PP obvian la principal dato para hacer sostenible el sistema, la necesidad de que haya el número suficiente de ocupados que garantice la sostenibilidad y esto es difícil de conseguir teniendo un 26% de personas en situación de desempleo.

En este tema, como en otros problemas de nuestra economía, la raíz está siempre en el mismo lugar, CAL CREAR EMPLEO, y con las actuales políticas europeas y españolas eso no es posible. El sindicalismo europeo, mediante la CES, ya ha levantado la voz de alarma ante una situación insostenible que puede acabar con el propio proyecto europeo. Es necesario un nuevo Plan Marshall, tal como se hizo con la Alemania de la posguerra, para ayudar a salir de la actual situación en el conjunto de la UE y en especial en los países del sur de Europa. Todo lo demás son medidas inútiles cuando no contraproducentes para salir de la actual callejón sin salida.

Rajoy, Merkel, falsarios! Lo que hace falta es crear empleo