Las tres agrupaciones de izquierda esperan obtener una mayoría suficiente para nombrar presidente a Gabilondo. Y claro, que no les acaben comprando a uno o dos diputados, que antecedente hay.
La gobernabilidad tiene un reto principal: desinflamar la hinchazón catalana y acometer las demás cuestiones pendientes, pero sin lo primero, no habrá nada más.