jueves. 28.03.2024

25N: ICV-EUiA la alternativa de izquierdas

El próximo 25 de noviembre afrontaremos unas elecciones anticipadas en Cataluña. Todo es fruto de una maniobra de Mas y CiU para esconder dos años de políticas antisociales en todos los campos, de acuerdo con el PP en Cataluña y Madrid, ahora bajo la bandera de un pseudo-independentismo que habrá que ver en que queda.

El próximo 25 de noviembre afrontaremos unas elecciones anticipadas en Cataluña. Todo es fruto de una maniobra de Mas y CiU para esconder dos años de políticas antisociales en todos los campos, de acuerdo con el PP en Cataluña y Madrid, ahora bajo la bandera de un pseudo-independentismo que habrá que ver en que queda.

La actuación de Mas es de una astucia innegable, hace un llamamiento a un patriotismo abstracto donde dibuja el futuro ideal de una Catalunya independiente como la panacea que nos librará de todos los problemas. Es evidente que esto engancha con una buena parte de la ciudadanía que es consciente de la existencia de agravios económicos pero también de la falta de comprensión del hecho diferencial nacional de Cataluña. Esta situación llegó a su cenit con la resolución a la impugnación del PP por parte del Tribunal Constitucional a un proyecto de Estatuto ya recortado y que había sido aprobado tanto por el Parlamento como por las Cortes españolas y aprobado en referéndum por el pueblo catalán.

Lo que ahora, con la convocatoria de elecciones, CiU esconde es como ha podido tener como socio preferente en toda la legislatura el PP, el partido que más encarnizadamente ha provocado un sentimiento anticatalán en el conjunto del Estado. Y como ambos han defendido las mismas políticas de recortes, en educación, sanidad, servicios sociales y atacado todo lo que es público de forma mancomunada, y bajo un pensamiento único derivado del que Merkel hace predominar en toda Europa.

Ahora con la guerra de nacionalismos, con el enfrentamiento de banderas, Mas pretende sacar provecho de los sentimientos de la ciudadanía y hacer que se olviden de sus políticas de recortes llevadas a cabo en estos dos años, lo que aunque parezca contradictoria, también es el campo que le conviene al PP. Nuevamente la batalla identitaria trata de robar presencia al conflicto social y que el conflicto territorial se sobreponga al de derecha-izquierda.

La batalla electoral se lleva a cabo en un campo diseñado por CiU y la derecha gobernante, y todo ello en un momento de fuerza dificultad para articular una alternativa de izquierdas. En primer lugar por la propia situación de dos de las fuerzas componentes del tripartito ERC y PSC. La primera ha decidido apostar por la opción independentista antes que por la opción social, incluso ha llegado a proponer, kafkianament, a Mas sustituir la coalición CDC-UDC por una CDC-ERC, todo esto ya se hacia evidente a raíz del cambio de dirigentes producido en su último Congreso. Por su parte el PSC se encuentra en una profunda crisis de estrategia, organizativa y de liderazgo, a pesar de la clara honestidad de su dirigente Pere Navarro. Incluso su oferta basada en el federalismo es rechazada por su partido a nivel del Estado (PSOE) lo cual le resta toda credibilidad.

Así en el campo de la izquierda sólo queda con voluntad de hacer de alternativa y oposición a las posiciones de la derecha ICV-EUiA. Y es una posición coherente avalada por su actuación. Durante mucho tiempo la coalición ha hecho la travesía del desierto. En los momentos de opulencia, derivada de la burbuja inmobiliaria ", los ecosocialistas defendían en solitario y a contracorriente posiciones que ahora se ven refrendadas. Y eso hace que sean una opción política coherente que no se dedica a hacer cambios tácticos sino que tiene una estrategia definida y muy aposentada dentro de la organización. Cuando muchos sólo hablaban del AVE, ICV-EUiA lo criticaba defendiendo la primacía de potenciar la red ferroviaria de regionales y cercanías y especialmente la red de mercancías. En el tiempo de la burbuja inmobiliaria ya proponía la necesidad de un modelo de desarrollo más sostenible y no basado en el "ladrillo", especialmente impulsando la economía verde como hacen muchos países del norte de Europa. Y cuando nadie mencionaba el tema de los desahucios, ya hace 7 años, primero Joan Herrera, luego Núria Buenaventura y últimamente Joan Coscubiela proponían medidas contra estos y siempre se encontraban con el voto en contra de PSOE-PP-CiU.

Las propuestas y la acción de ICV-EUiA han estado muy vinculadas en la calle a las reivindicaciones de la izquierda social, especialmente los sindicatos, pero también a plataformas como la PAH contra los desahucios, u otros en defensa de la sanidad o la educación pública.

Al mismo tiempo a las instituciones, tanto en Cataluña como en Madrid, han defendido en todo momento posiciones claramente de izquierdas y de defensa de los derechos sociales de la ciudadanía y de refuerzo del estado del bienestar, así como una reforma fiscal que haga que paguen los que más tienen, en contra de las políticas desfiscalitzadoras de los Gobiernos de PSOE y PP en Madrid o de CiU en la Generalitat. Oponiéndose a las Reformas Laborales de PSOE –PP con el apoyo de CiU, y apoyando siempre a las Huelgas Generales convocadas por los sindicatos. Y también han estado en contra de la Reforma Constitucional que Zapatero, con el acuerdo PSOE-PP, hizo y que consagró la devolución de la deuda como política prioritaria, lo cual fue un verdadero golpe de estado constitucional.

ICV-EUiA ha estado en el Parlamento de Cataluña la oposición real a CiU, a pesar de tener sólo 10 diputados. Presentando alternativas, reivindicando las políticas progresistas del tripartito y negándose a hacer cola, como han hecho ERC y PSC, por ser "pareja de baile" del Gobierno.

Hoy en Cataluña ICV-EUiA ya no es una promesa de futuro. La coalición ha logrado mantenerse a pesar de todos los problemas que puedan haber, y esta vez hemos visto cómo han recibido el apoyo explícito tanto de Equo como de IU. Hoy ya es una realidad en marcha. Los propios medios de información que en otro tiempo le mostraban desprecio ahora la tratan con seriedad, una seriedad política que han ganado a base de trabajo cuidadoso. Porque ICV-EUiA es contraria al juego de la política-espectáculo y a considerar a los ciudadanos como consumidores de la política, al contrario trata de que los ciudadanos entiendan la política, su importancia y se involucren en una lucha que significa mucho más que votar cada vez que hay elecciones.

ICV-EUiA es tan consciente de su situación en un panorama desolador, por renuncia o huida de otros referentes de la izquierda, que ahora trata de consolidarse como un embrión de alternativa de la izquierda que quiere crecer en el futuro con mucha otra gente en torno a unas propuestas políticas que sean capaces de motivar a la gente a luchar por nuevos espacios de igualdad, de defensa de los servicios públicos, del estado del bienestar y de participación social en la vida política. Una política alternativa a la de los recortes y el austericidio, que se base en un mayor reparto de las cargas de la crisis, de forma que paguen más los que más tienen. Que no se continúe con una política que castiga un 99% de la población en beneficio de un 1%. Una política basada en una fiscalidad justa y progresiva que permita una mayor distribución de la riqueza existente, consolidando el estado del bienestar con servicios públicos de calidad, y garantizando un mayor crecimiento de las rentas de las clases populares lo que conllevará un mayor crecimiento del consumo y estimulará la producción. Todo ello a la vez incorporando la aplicación de I+D+i a los procesos productivos y organizativos de las empresas que permitan el incremento de la productividad y la competitividad de los sectores de futuro, evitando potenciar e incluso castigando fiscalmente los sectores puramente especulativos.

Por que esta es la clave del problema, ICV-EUiA es partidaria del derecho a decidir pero en el sentido de que la ciudadanía decida qué sociedad quiere, tanto en lo referente a su articulación con el conjunto del estado como respecto a qué tipo de sociedad construir en cuanto al bienestar social de los ciudadanos. Por eso ha sido tan importante que la Huelga General del 14N, contra los recortes de Mas y Rajoy, con la participación de cientos de miles de catalanes, haya caído en medio de la campaña, evitando que los temas sociales salieran fuera de la agenda ; o que el tema de los desahucios haya tomado cuerpo, lo que ha provocado que todo el mundo tenga que retratarse políticamente. En ambos casos ICV-EUiA ya estaba situada hace muchos tiempo con la coherencia del trabajo realizado y por tanto no le ha sido necesario cambiar una coma en su posición. Ya lo dice su "slogan" electoral "Y tanto si podemos... Derecho a decidir si Derechos sociales TAMBIEN!

25N: ICV-EUiA la alternativa de izquierdas