viernes. 19.04.2024

“50 cents people”, una gran muralla de propagandistas a tanto la pieza

En puertas ya de los Juegos Olímpicos el gobierno chino, una vez más, riza el rizo de la desfachatez dando a unos cuantos miles de sus ciudadanos la oportunidad de que �a cincuenta céntimos de yuan cada intervención- entren en blogs y foros de Internet y cuelguen en ellos comentarios favorables a la política oficial. Son los “50 cents people”.
En puertas ya de los Juegos Olímpicos el gobierno chino, una vez más, riza el rizo de la desfachatez dando a unos cuantos miles de sus ciudadanos la oportunidad de que �a cincuenta céntimos de yuan cada intervención- entren en blogs y foros de Internet y cuelguen en ellos comentarios favorables a la política oficial.

Son los “50 cents people”. Según Olwan Lan, una internauta que vive en Hong Kong desde donde gestiona su blog, y donde tiene pendiente una denuncia por haber introducido en él un enlace con un desnudo, se trata de gente independiente que, o bien dispone de su propio blog, o bien se compromete a entrar en las páginas de otros y dejar allí sus opiniones. Olwan Lan lo ha contado todo en el blog de un periodista de Hong Kong: “Thomas Crampton: China, Internet and new media seen from Asia” (la entrevista puede encontrarse en la web de France 24, sección Los observadores). Según explica, las autoridades han reclutado en primer lugar entre los periodistas, que de esta forma se sacan un sobresueldo, algunos incluso varios cientos de yuans mensuales lo que allí es una cantidad importante; después entre miembros del propio Partido Comunista y finalmente en la Universidad de Tsinghua, el centro donde se forma la �lite china. Preferiblemente personas de sexo masculino, porque una de las recomendaciones es entrar, y opinar, en páginas pornográficas y en China estaría muy mal visto encargar este tipo de tarea a las mujeres.

Olwan Lan, que no tiene pelos en la lengua, define este entramado manipulador como “la Gran Muralla” que el gobierno chino ha tejido en torno a la información. No es una campaña más de censura, con tanta tradición por aquellos lares, sino una estrategia de manipulación (para censurar Internet, y acosar y detener a internautas, cuentan con cinco organismos oficiales, dependientes de distintos ministerios y de la propia presidencia del Estado, que disponen de sus propios cuerpos policiales y una extensísima red de soplones, más el trabajo sucio de “colaboración” de empresas como Yahoo, Google o Cisco Systems. El último, ayer mismo, el disidente Du Daobin, detenido y acusado de “publicar artículos en el extranjero, circular sin permiso por el territorio chino y alojar a amigos en su casa, sin permiso). Aquí se trata de manipular la opinión pública, la propia y la ajena. De entrar en las páginas de los blogs, buscar cualquier tema que pueda contener la más mínima crítica de la política gubernamental china y colgar un comentario diciendo que no es para tanto, que ocurre en todas partes, que el gobierno lo hace por el bien general. O de entrar en los foros, sumarse a la conversación, e ir dejando caer unas cuantas perlas favorables al gobierno, el Partido, los Juegos Olímpicos, etc.

Al parecer, el invento lleva un par de años funcionando. Hay quien, con ello, se ha pagado unas vacaciones. Es probable que -igual que va ocurrir con los tres millones de parados que han vivido los últimos meses en Pekín levantando a marchas forzadas hoteles, residencias, parques y centros comerciales, y que saben que su trabajo finaliza el 1 de agosto y están condenados a ver los Juegos en la televisión de su pueblo porque en las calles de Pekín el día 8 no puede quedar ni un parado ni un mendigo- a todos estos miles de “propagandistas a 50 céntimos” se les termine el chollo antes que el verano.

“50 cents people”, una gran muralla de propagandistas a tanto la pieza
Comentarios