sábado. 20.04.2024

Airbus. Ni un paso atrás

Tal vez este juicio sea el principio del fin de un periodo de destrucción de derechos, de libertades. Los compañeros del metal, los trabajadores, los ciudadanos tienen, tenemos, la palabra...

Delegados de CCOO a las puertas del Juzagado. (Fotos: Nuria Silván. Industria CCOO).
Delegados de CCOO a las puertas del Juzagado. (Fotos: Nuria Silván. Industria CCOO).

Las fábricas tienen memoria y los trabajadores también. Hay centros de trabajo que son especialmente emblemáticos donde son capaces de convivir importantes niveles de competitividad empresarial y de fortaleza sindical. Es un binomio que ha funcionado bien en la factoría de Airbus, donde hay una importante trayectoria de lucha sindical, de negociación colectiva, de buenos convenios, de buenas condiciones laborales, de solidaridad.

En la Huelga General del 29 de septiembre del año 2010, cuando los sindicatos convocaron la huelga contra la reforma laboral, que abría la puerta al despido por causas económicas y abría la puerta también a los EREs en el sector publico, cuando bajo el eslogan de “Yo voy”, millones de trabajadores participaron en la huelga, también lo hicieron los trabajadores de Airbus.

Sin embargo al día siguiente de la jornada calificada por los sindicatos como un éxito importante, hubo un hecho que nubló la jornada: los sindicatos convocan una rueda de prensa y difunden dos vídeos grabados en Airbus, donde se ve cómo agentes de la Policía Nacional efectuaron disparos al aire. Un vídeo está grabado en el interior del recinto industrial, el segundo desde el exterior, donde se escuchan los disparos. En la rueda de prensa Fernando Lezcano, portavoz de CCOO, pone sobre la mesa las balas utilizadas. Afortunadamente los trabajadores y los sindicalistas de la fábrica mantuvieron la cordura. Afortunadamente trabajadores responsables calmaron los ánimos. Afortunadamente había dirigentes sindicales queridos y respetados por los trabajadores.

En la siguiente Huelga General, la del 29 de marzo del año 2013 contra otra vuelta de tuerca de la reforma laboral y la siguiente del 14 de noviembre contra el gran ajuste del Gobierno que preside Mariano Rajoy, los trabajadores de Airbus secundan la convocatoria, como siempre lo hacen.

Hoy, ocho sindicalistas de Airbus están en serio riesgo de pisar la cárcel. El juez pide ocho años de cárcel por los sucesos ocurridos en la Huelga General del 29 de septiembre. En total 8 sindicalistas para los que se pide 8 años de cárcel a cada uno. Retrocedemos. Ciertamente estamos retrocediendo.

Las Comisiones Obreras han empezado una compaña contra esta posible condena a los sindicalistas de una fábrica emblemática. Y no han dudado en afirmar que la acusación contra los sindicalistas de Airbus no tiene precedentes desde la dictadura, y es una muestra de la involución que estamos sufriendo. También han alertado que este proceso puede tener similitudes con el histórico proceso 1001.

Son muchas las personas que piensan que el juicio 1001 fue el principio del fin de la dictadura. Tal vez este juicio sea el principio del fin de un periodo de destrucción de derechos, de libertades. Los compañeros del metal, los trabajadores, los ciudadanos tienen, tenemos, la palabra.

Airbus. Ni un paso atrás