martes. 16.04.2024

¿Otra reforma de las pensiones?

El agujero de la Seguridad Social trae causa en el paro y en los bajos salarios, pero también en decisiones de bonificación de cuotas cuya utilidad es muy dudosa.

Lo que conviene al colectivo de pensionistas es que se equilibren las cuentas de la SS con cargo a presupuesto; que se restablezca la revalorización automática con la inflación y que se mejoren las pensiones mínimas

Los ocho millones y medios de pensionistas españoles son un colectivo numeroso, tanto que si se añaden las personas a cargo tendríamos el grupo de votantes más importante de los que se pueden establecer en el electorado. Por eso,  llama la atención el escaso espacio que el asunto de las pensiones ocupa en las campañas electorales.

Esta campaña parece ser la excepción. A raíz de la propuesta del PSOE de implantar un nuevo impuesto sobre grandes fortunas, que se destinaría de modo finalista a las pensiones, ha aflorado un cierto debate sobre el futuro del sistema público de pensiones. En él no falta quien se pronuncie por su reforma. Hasta ahora, reforma es un eufemismo para no decir recorte, lo cual nos lleva a mirarlo con desconfianza.

Para intervenir en el debate debemos preguntarnos cómo está el sistema público de pensiones. El balance del gobierno del PP se puede resumir en estos puntos:

  • Todos los años la Seguridad Social ha cerrado con déficit, que, además, cada año ha sido mayor. Así, 2011 fue el primer año, en mucho tiempo, que la Seguridad Social registró déficit (487 m€). En 2015 se elevó a 16.707 m€. Con el Gobierno del PSOE, la Seguridad Social había tenido superávit todos los años, incluso en lo peor de la crisis.
  • En los cuatro años de gobierno del PP, el déficit acumulado ha sido de 36.769 m€, una cifra realmente abultada. Para cubrirlo, ha usado el Fondo de Reserva que, cuando llegó al Gobierno, tenía 66.815 m€ y en tan solo cuatro años lo han dejado casi en la mitad. Por eso, puede afirmarse que las pensiones se han pagado estos años gracias a la reserva que dejó el Gobierno socialista (el PP no habla de esta “herencia recibida”). Está bien que el Fondo se use para pagar las pensiones: para eso está. El problema es que con un déficit desbocado como en que hay ahora, el Fondo de Reserva se agotará en dos o tres años. ¿Y después? De aquí se deduce que algo habrá que hacer en la próxima legislatura.
  • La reforma que hizo el PP, a poco de llegar al Gobierno, tenía por objeto, entre otras cosas, acabar con la revalorización automática de las pensiones con el IPC. En estos cuatro años, las pensiones se han revalorizado el 0,25 % cada año, es decir, un 1 % en el cuatrienio. En la práctica ha sido una casi congelación. Afortunadamente, la inflación en ese período ha sido muy baja (un 2,1 % en los cuatro años) con la que pérdida de poder adquisitivo ha sido pequeña. Pero el PP ha introducido medidas que aumentan el gasto de los pensionistas, entre las que cabe destacar el copago farmacéutico. La combinación de ambas cosas, es decir, una casi congelación de las pensiones y un aumento de gastos lleva a la conclusión de que se los pensionistas han perdido calidad de vida en estos cuatro años del PP.
  • El paro y los bajos salarios obligan a muchos pensionistas aayudar con su pensión al mantenimiento de su familia. Si hace unos años se suponía que los pensionistas recibían ayuda de su familia, ahora sucede lo contrario: en muchos casos la pensión se ha convertido en el principal ingreso regular de la familia.
  • El gobierno del PP ha tomado medidas sobre la reforma de las pensiones de modo unilateralsin respetar el Pacto de Toledo, según el cual las medidas a adoptar sobre pensiones deberían ser acordadas por todos los partidos y las organizaciones sociales. De este modo, se sacaba el futuro de las pensiones del debate partidista a corto plazo y se procuraba que las medidas que se hubieran de tomar fueran justas y equilibradas.

Fácil es concluir que el agujero de la Seguridad Social trae causa en el paro y en los bajos salarios, en primer lugar. Pero también en decisiones de bonificación de cuotas que el Gobierno ha decidido por su cuenta y cuya utilidad es muy dudosa. La reducción del paro y la mejora de los salarios son el camino para reducir el déficit y para equilibrar las cuentas después. Pero esto exige otra política económica. El balance del gobierno del PP en materia de empleo se resume  en un par de datos: en sus cuatro años de gobierno tenemos el mismo número de personas trabajando  (la ocupación no ha aumentado). Pero los salarios han disminuido: con el mismo número de trabajadores que hace cuatro años, el volumen global de los salarios ha bajado en 40.000 m€/año. La salud del sistema público depende de una política económica orientada a crear empleo y a mejorar salarios.

Pero aun así, es posible que se agote el Fondo de Reserva antes de que se equilibren las cuentas. Si eso ocurre, entonces no habrá otra que sacar lo que falte de los impuestos. No se entiende la negativa del PP y de C´s a esta idea, sobre todo, teniendo en cuenta que en estos años se han pagado algunas pensiones con cargo al presupuesto. No estoy seguro que lo mejor sea establecer un impuesto finalista: prefiero que se cargue a presupuesto y se pague con el conjunto de los impuestos. Pero, en todo caso, lo que haya de hacerse debería ser por consenso, recuperando el Pacto de Toledo.

Además de abordar y resolver esta cuestión los partidos deberían explicar en esta campaña si se proponen mantener la reforma llevada a cabo por el PP o si piensan abordar su modificación. En mi opinión, debería recuperarse la revalorización de las pensiones con el IPC, aunque, dada la evolución de la inflación, esto no sea algo urgente. A la vez, deberían aumentar las pensiones mínimas. Y, finalmente, debería reconsiderarse la cuestión del cálculo de la pensión para los nuevos pensionistas. En definitiva, lo que conviene al colectivo de pensionistas es que se equilibren las cuentas de la SS con cargo a presupuesto; que se restablezca la revalorización automática con la inflación y que se mejoren las pensiones mínimas.

¿Otra reforma de las pensiones?