Miles de profesores gallegos han vuelto a marchar por las calles de Santiago de Compostela para protestar por el "recorte" de "casi mil profesores" en la enseñanza pública y para reclamar que la Consejería de educación de Galicia retire la orden del pasado mes de junio por la que se incrementa el horario lectivo de los docentes y se les atribuyen "nuevas funciones", lo que consideran que va "en detrimento de la calidad de la enseñanza".
Alrededor de las 11.40 horas de este miércoles, a vuelto a partir de la Alameda compostelana una manifestación que insistía en las consignas que ya se escucharon en la primera movilización del pasado día 9, bajo lemas como 'Mantemento do horario lectivo é calidade para o ensino' ('Mantenimiento del horario lectivo es calidad para la enseñanza') o 'Negociación, non imposición' ('Negociación, no imposición').
Los seis sindicatos convocantes --CIG-Ensino, CC.OO., FETE-UGT, ANPE, STEG y CSI-CSIF-- han calificado de "éxito" la huelga, cuyo seguimiento cifran en un 75 por ciento del profesorado, si bien puntualizan que fue "desigual", con una mayor incidencia en las provincias de La Coruña y Pontevedra respecto a Lugo y Orense. Asimismo, han manifestado su "satisfacción" con la asistencia a la manifestación, en la que han contabilizado 15.000 personas.
Así, a lo largo del trayecto que une la Alameda y la sede de la Consejería de Educación en San Caetano, durante alrededor de una hora se han escuchado consignas como "Feijóo, austero, recorta ao conselleiro" ("Feijóo, austero, recorta al conselleiro") o "Conselleiro, dimisión" ("Consejero, dimisión"), que han finalizado con la lectura de un manifiesto por parte del exmaestro y escritor Xabier Docampo, en el que el profesorado proclamaba que "no va a parar" hasta conseguir detener "esta agresión sin precedentes".
RESPUESTA "NEGATIVA"
Los representantes sindicales han coincidido en que, desde que comenzaron las movilizaciones el pasado 9 de septiembre, no se ha producido "ningún intento de diálogo" por parte de la consejería gallega. De hecho, Jesús Fuentes, de CC.OO., ha apuntado que la respuesta de la Administración ha sido "negativa", al informar de que "apuesta por la Formación Profesional (FP) cuando no es cierto", ya que, según ha señalado, en los últimos dos años "ha eliminado más de 300 ciclos".
Ante esta situación, y si no se producen las conversaciones bilaterales que los sindicatos reclaman con estas movilizaciones, las organizaciones sindicales aseguran que actuarán "como una piña, con "nuevas iniciativas que estudiarán de forma unitaria" y han coincidido en que "no van a cesar los esfuerzos" para que se retiren unas medidas "tomadas de forma unilateral".
Por otra parte, acerca del inicio del curso, las centrales sindicales han señalado que sus previsiones sobre la desmejora del funcionamiento de los centros "se han constatado", dando lugar a "situaciones esperpénticas", tal y como ha afirmado Fuentes, que ha criticado que profesores especializados en Educación Primaria tengan que hacer prácticas en Infantil, o que docentes de Lengua Gallega en Secundaria se vean obligados a impartir Francés "incluso en Bachillerato".
DESPRESTIGIO DE LA FUNCIÓN DOCENTE
Los manifestantes también han censurado el "desprestigio de la función docente" que lleva a cabo la Junta de Galicia "para favorecer a la enseñanza privada" y han mostrado su rechazo a que se les impongan tareas como la guardia y custodia de los niños, que "no son de su competencia".
En la marcha de este miércoles ha destacado el mayor apoyo estudiantil, con la presencia del sindicato Liga Estudiantil Gallega o la formación política Galiza Nova, que portaba una pancarta en la que se podía leer 'Non á privatización do Ensino' ('No a la privatización de la enseñanza'), así como por parte de las asociaciones de padres, según ha resaltado el secretario general de CIG-Ensino, Anxo Louzao.
De este modo, los sindicatos concuerdan en que el "éxito" de las convocatorias hace "evidente" que la Consejería de educación "debe "negociar con la comunidad educativa y "rectificar" en la ruptura unilateral del acuerdo que en 2007 suscribieron "de forma unánime" el Gobierno autonómico y las organizaciones sindicales, y han instado a la comunidad educativa a participar de nuevo en la huelga que tendrá lugar el próximo martes 27 de septiembre.
