jueves. 28.03.2024

Muchas empleadas siguen sufriendo el conocido e indigno “pago es especie”La 100 conferencia de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) aborda desde hoy el debate y eventual aprobación de una Resolución sobre trabajo doméstico. España lleva a este evento las mejoras sobre salario mínimo y cobertura de accidentes de trabajo para las empleadas de hogar, mientras Gobierno y agentes sociales ultiman los acuerdos para la integración de las empleadas de hogar en el Régimen General de la Seguridad Social.

Las últimas medidas aplicadas por España en la reforma laboral (17 de septiembre 2010) y en la Ley de presupuestos de 2011 han supuesto algunas mejoras en lo que hace a los derechos de las empleadas del hogar, si bien es cierto, que es la integración en el Régimen General de la Seguridad Social, la demanda fundamental que estas personas vienen demandando.

Los cambios legislativos incluyen la garantía de percibir como mínimo el importe del salario mínimo interprofesional vigente en cada momento y en tiempo comparable con la jornada realizada, sin que esa cuantía pueda ser minorada con descuentos de cualquier naturaleza, como alimentación o vivienda. No obstante, muchas empleadas siguen sufriendo el conocido e indigno “pago es especie” y la falta de cumplimiento de las condiciones salariales y de duración de la jornada. Algunas por desconocimiento, pero otras porque su situación no les permite negociar nuevas condiciones de empleo. En este último bloque destacan sobre todo las mujeres inmigrantes.

Una enmienda en la Ley de Presupuestos Generales del Estado para 2011, garantiza la protección por accidentes de trabajo y enfermedades profesionales. Las empleadas de hogar tienen esta protección desde el pasado 1 de enero, pues anteriormente eran las únicas personas en régimen laboral de dependencia que no tenían dicha cobertura.

Además de estas medidas ya en vigor, el Gobierno y los agentes sociales ultiman la integración de las empleadas de hogar en el Régimen General de la Seguridad Social, según el acuerdo alcanzado por las tres partes en julio de 2006 y el Acuerdo para la reforma y el fortalecimiento del Sistema de Pensiones, suscrito entre el Gobierno y las organizaciones sociales el 2 de febrero de 2011.

Pero esta reforma será compleja. Más de 700.000 hogares españoles emplean a una trabajadora doméstica, según la Encuesta de Población Activa del INE. Sin embargo, solo 296.067 personas están afiliadas al régimen especial de empleo de hogar de la Seguridad Social. Un dato que revela que muchas de estas personas ejercen al margen de legalidad y por tanto, carecen de derechos.

Estas vulnerabilidades se analizarán esta semana en la conferencia de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), donde se debatirán las claves para lograr un empleo doméstico “decente”. Esta institución, que alerta de que esta es una de las formas de empleo más desprotegidas, donde la explotación es frecuente, propondrá a sus países miembros un convenio para lograr mejores condiciones en lo que considera un trabajo “infravalorado e invisible”.

Entre las medidas está la de fomentar el contrato escrito o que el periodo de descanso sea, al menos, de 24 horas seguidas a la semana.

La OIT aborda el debate sobre el trabajo doméstico