jueves. 28.03.2024

Europa Laica vuelve este año a solicitar a los contribuyentes que no marquen ninguna de las dos casillas del IRPF, ni la de la “Iglesia católica” ni tampoco la de “Fines Sociales”, ya que "los más de 500 millones de euros que se detraen por estas dos vías dejan de atender necesidades básicas de toda la ciudadanía, como sanidad, servicios sociales, educación u obras públicas, entre otras".

Francisco Delgado, Presidente de Europa Laica presentÓ esta semana la ‘Campaña IRPF-2015’ y el documento actualizado sobre ‘Financiación y Opacidad de la Iglesia católica’, con las cifras de la aportación total por parte del Estado a la Iglesia católica. 

Según el informe, la Iglesia Católica y sus entidades afines están financiada por el Estado con más de 11.000 millones de euros al año, lo que representa más del 1% del PIB, “a través exenciones tributarias donde están incluidas muchas partidas económicas de difícil cuantificación por falta de transparencia y contabilidad ad-hoc”, denuncia la organización.

Para Europa Laica, “es injusto que todos los contribuyentes, sean católicos o no, financien a la Iglesia católica, ya que los que marcan su casilla no pagan de más, sino que lo detraen del conjunto de los ingresos del Estado, en una cantidad sobre 250 M€, mientras que quienes no marcan ninguna casilla aportan el 100% de sus impuestos a las arcas del Estado para que se puedan atender las necesidades comunes.

Más del 65% de contribuyentes no marcaron la casilla de la Iglesia católica en 2014

Europa Laica exige al Estado que la Iglesia católica y otras confesiones deben de autofinanciarse. Como dato, tan solo el 35% de los contribuyentes marca a la Iglesia católica el año pasado, mientras que más del 65% NO marcaron la casilla de la Iglesia católica, porcentaje que se viene manteniendo desde tiempo atrás.

Europa Laica, por otra parte, entiende que la casilla de Fines de Interés Social -que algunos llaman  “casilla solidaria”- (con 285 M€ el año pasado), “es una injusta y torpe coartada” para mantener la casilla de asignación a la Iglesia católica. Además, entiende, que las entidades que son subvencionadas a través de esa casilla no pueden depender de la "voluntad mayor o menor de marcar” por parte de los contribuyentes, sino que la cantidad que proceda debe formar parte de las políticas públicas de forma directa, dentro de los Presupuestos del Estado, de los ayuntamientos y de las CCAA. Por otra parte, hay que hacer notar que la mayor parte de este reparto cae en entidades que pertenecen a la Iglesia católica, por lo que al marcar esta casilla también saca beneficio, denuncia.

Francisco Delgado rechaza y condena “la inmensa publicidad que la Conferencia Episcopal Española viene realizando en radio, prensa escrita y digital, y televisión, con dinero público,  es decir de todos y todas, católicos o no, -en cantidad que puede superar los seis millones de euros- para recabar que se marquen las dos casillas del IRPF en base a argumentos y datos que contienen un cúmulo de desinformación cuando no de simples falsedades o medias verdades”.

La Iglesia Católica pague el IBI

Por otro lado, Europa Laica, informa de la continuación de su campaña Que la Iglesia Católica pague el IBI’, esperando que los nuevas corporaciones municipales que resulten de las próximas elecciones defiendan lo público, revisando los datos y criterios que dan lugar a las amplias exenciones de privilegio por este tema, valoradas en más de 700 millones de euros anuales a nivel estatal que se dejan de ingresar en las arcas públicas. Europa Laica denuncia esta situación de privilegio fiscal a la vez que reclama mayor control y transparencia por parte de las instituciones municipales evitando casos como el que recientemente ha informado sobre el estudio realizado por Valencia-Laica sobre la exención del IBI de la Iglesia católica en Valencia-ciudad, donde se han detectando situaciones que se pueden catalogar de simple “fraude fiscal” por inmuebles exentos por el simple hecho de pertenecer a la Iglesia católica, pero sin tener derecho legal a ello por estar dedicados, no al culto sino, por ejemplo, al negocio inmobiliario.

Inmatriculaciones y modificación de la Ley Hipotecaria

Por otro lado, la organización también ha informado de las iniciativas en curso relacionadas con las inmatriculaciones (usurpaciones) que la Iglesia católica “ha venido haciendo ilegítimamente durante años –contando con la complicidad del poder político-, aumentando con ello su enorme patrimonio inmobiliario”. La modificación de la Ley Hipotecaria, actualmente en trámite parlamentario, propone se le retire a la Iglesia católica la potestad de ser considerada como entidad pública y a los Obispos como “notarios” que puedan inmatricular bienes. Europa Laica, además de este cambio, sigue reclamando que se devuelvan a sus verdaderos propietarios (entes públicos en su mayoría) todas las “usurpaciones” realizadas desde que está vigente esta norma, denunciando la ”amnistía inmobiliaria” en beneficio de la Iglesia católica. 

El Estado deja de ingresar 700 millones al año por exenciones de impuestos a la Iglesia