Lavrov ha subrayado que no están "contentos" por los últimos acontecimientos registrados en Libia y que han llevado a la comunidad internacional "a un conflicto sobre el terreno". Estos pasos, ha advertido, son de "consecuencias impredecibles".
"Recordemos el envío de instructores a otros países y que posteriormente fueron enviados soldados; cientos de personas murieron en ambos bandos", ha asegurado el jefe de la diplomacia rusa, durante una comparecencia ante los medios en la capital eslovena, Liubliana.
El Gobierno británico fue el primero en anunciar, el pasado martes, el envío de oficiales militares con los que pretende asesorar al Consejo Nacional de Transición, el órgano administrativo de los sublevados contra Gadafi y cuya sede se encuentra en Benghazi. Francia anuncio el miércoles el traslado de diez asesores con este mismo objetivo.
Moscú, que se abstuvo en el Consejo de Seguridad durante la votación que dio pie a los bombardeos extranjeros sobre Libia, ha criticado en reiteradas ocasiones la forma en que se desarrolla este operativo.