viernes. 19.04.2024

El mapa del Océano Glacial Ártico, que cubre alrededor del 5% de la superficie del planeta ya no es el de hace dos décadas. Debido al aumento de la temperatura, el hielo de esta zona se está reduciendo rápidamente, haciendo posible un acceso que antes era muy difícil, lo que está originando una carrera entre varios países para reclamar sus supuestos derechos a explotar los recursos del lecho marino, rico en hidrocarburos.

Según informa la revista Nature, la observación del Ártico por satélite, que se inició en 1979, ha llevado a los científicos a concluir que se ha reducido la masa de hielo en un 12% por década, y en los últimos 5 años ha alcanzado el nivel más bajo conocido. Los pronósticos de los modelos climáticos indican que el hielo marino de verano en gran medida va a desaparecer en la segunda mitad del siglo, aunque la tasa actual de pérdida de hielo supera las previsiones de los modelos, lo que sugiere que esa desaparición podría alcanzarse mucho antes de lo previsto.

Según la Convención de Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar, los países limítrofes pueden reclamar los derechos sobre los recursos del lecho marino en el Ártico, en función de su costa y la geología del fondo marino. Rusia y Noruega han realizado ya sus reclamaciones. La importancia de las reservas de petróleo y los altos precios actuales que alcanza, están impulsando a varias empresas petroleras que han comenzado a efectuar prospecciones en las costas de Groenlandia y en los mares de Kara y Barents.

Todo parece indicar que una nueva “fiebre del oro negro” está llegando a las regiones del entorno del Polo Norte.

El nuevo mapa del Ártico