jueves. 18.04.2024
europa

El 62% de los españoles hace una valoración globalmente positiva de la pertenencia de su país a la UE, frente al 40% de los franceses

Una encuesta, elaborada por la Asociación Diálogo y el Real Instituto Elcano, muestra las diferencias, pero también similitudes de opinión entre españoles y franceses sobre la Unión Europea.

Identidad europea

La fuerza de la identidad europea en España es mayor que en Francia. En una escala de 0 a 10, la media española en cuanto a “hasta qué punto se siente usted europeo”, es de 7,2 frente a 5,8 en Francia.

Tanto en Francia como en España los que mantienen posiciones negativas hacia la UE son una minoría, del 28% en Francia y del 15% en España. Sin embargo, el entusiasmo europeísta de los españoles es mayor: el 62% de los españoles hace una valoración globalmente positiva de la pertenencia de su país a la UE, frente al 40% de los franceses. Quizá porque la inmensa mayoría de los franceses ha llegado a la edad adulta en una Francia ya integrada en la UE, no aprecian tanto como los españoles la diferencia entre la situación de su país antes y después de la entrada en la Unión.

Confianza en las instituciones europea

Es más alta entre los españoles, que confían más en esas instituciones que en las nacionales, mientras que los franceses tienen mejor opinión de su propio Gobierno y de su Parlamento que de los europeos.

Salida o permanencia en el euro

El deseo de permanencia en el euro es muy amplio en ambos casos, pero menor en Francia (64%) que en España (76%).

Principales logros de la UE

Para los franceses, cuyo país ha estado sumido a lo largo de los siglos en guerras contra otros Estados europeos, la principal aportación de la UE es la paz. Para los españoles el logro más valorado de la UE es la posibilidad de vivir y trabajar en otro Estado, la libertad de movimientos y el euro.

Influencia de la ideología. Mientras que en Francia el euroescepticismo es un rasgo que se encuentra sobre todo en la derecha, en España este rasgo es más frecuente en la izquierda.

OBJETIVOS, FUTURO Y DESAFÍOS

Respecto a los objetivos de la UE, las diferencias se encuentran en el terreno económico. Mientras que Francia está más preocupada por los efectos de la globalización y ve a la UE como un instrumento para competir mejor en la economía globalizada, los españoles, que todavía se ven a sí mismos en el bando de los receptores de ayudas -pese a que España ha pasado a ser contribuyente neto al presupuesto comunitario-, quieren que la UE sea, en primer lugar, un gran distribuidor de riqueza, capaz de igualar las condiciones de vida entre los diferentes Estados miembros.

Futuro y desafíos

Aquí también hay diferencias: Francia es menos optimista (37%) que España (58%) sobre el futuro de la Unión.

Pero las diferencias aumentan cuando se pregunta por los principales desafíos o problemas que afronta la UE. En el caso de Francia destacan, con mucha diferencia, la llegada de inmigrantes y el terrorismo. En España las opiniones se dividen más, siendo el desempleo lo que más preocupa, seguido por el terrorismo, el futuro de las pensiones y los movimientos separatistas.

Políticas comunes y competencias de los Estados

Franceses y españoles mantienen actitudes alejadas en lo que respecta a la posibilidad de avanzar hacia una mayor ‘comunitarización’ de las políticas económicas y sociales. La mayoría de los españoles, en su confianza en la UE, están a favor de que se europeícen la política fiscal y el seguro de desempleo, mientras que los franceses están claramente en contra en ambos casos. Respecto a las normas bancarias, la mayoría en España y en Francia están a favor de que sean europeas, pero el porcentaje es mucho mayor en España.

También es muy diferente la actitud hacia una mayor inversión de los Estados europeos en defensa. Sólo el 35% de los españoles, frente al 60% de los franceses, está de acuerdo en que los Estados europeos deban dedicar más dinero a la defensa. Además, este asunto es menos divisivo en Francia que en España: en Francia también la izquierda está de acuerdo en que debe aumentarse el gasto militar, mientras que en España sólo la derecha mantiene esta opinión.

Aliados y poderosos en la UE

Tanto Francia como España consideran que Alemania debe ser su principal aliado dentro de la Unión Europea, aunque lo hacen de modo diferente: de forma concentrada con una gran mayoría en el caso francés (70%) y con la mitad de las respuestas en el caso español (54%).

Además, Francia y España se encuentran en una situación desigual respecto a la preferencia mutua como aliados dentro de la Unión Europea: mientras que para los españoles Francia debe ser el segundo aliado más importante (y los demás países apenas son mencionados), para los franceses ese papel se divide a partes semejantes, aunque pequeñas, entre España, Italia y Bélgica.

Gran parte de los españoles eligen a Francia como principal aliado, pese a saber que Alemania es más influyente. Quizá porque ven a Alemania como un posible adversario (que impone políticas restrictivas, por ejemplo) y buscan la alianza con otros Estados que puedan contrarrestar la influencia germana.

Una encuesta muestra las diferencias de opinión entre españoles y franceses sobre la UE