nuevatribuna.es
24 de mayo de 2010, 4:48
NUEVATRIBUNA.ES 22.05.2010
Ni muchos baños de multitudes ni muchos actos de fe ocultan la difícil situación a la que se enfrenta Francisco Camps después de que el Tribunal Supremo ordenara reabrir la ‘causa de los trajes’ por un presunto delito de cohecho.
Bajo el lema Nosotros cumplimos, el presidente de la Generalitat Valenciana protagonizó este sábado un acto del PPCV de balance de tres años de gestión 'popular' en la Comunitat y de autoafirmación de su liderazgo celebrado en el Palacio de Congresos de Valencia, y en el que participaron los alcaldes de Valencia, Alicante y Castellón, Rita Barberá, Sonia Castedo y Alberto Fabra, respectivamente, así como el presidente del PP de Valencia y de la Diputación provincial, Alfonso Rus.
Como ya viene siendo habitual desde que el Supremo corrigiera la decisión tomada por el Tribunal Superior de Justicia de Valencia de archivar la causa contra Camps, el dirigente valenciano no ha cesado un instante en salir en su propia defensa haciéndose la víctima y descolgándose con frases tales como "Estoy más feliz que ayer, más feliz".
En la misma línea se mostró este sábado en un acto al que no acudió Mariano Rajoy ni ningún dirigente del PP nacional. Las faltas también se hicieron notar por parte del PP de Alicante que preside José Joaquín Ripoll, el mismo que ya le diera plantón en la última junta directiva regional.
Preguntado por la prensa en Lleida donde acudió a una “caracolada”, Rajoy se limitó a decir que él no puede estar "todos los días en todas partes" y que estaba al corriente de los cargos del partido que asisten este sábado al acto de Camps, al tiempo que reiteró su apoyo al presidente valenciano.
Pero Camps, lejos de sentirse aludido por las ausencias, volvió a culpar al Gobierno central y al PSOE de "todo lo que está pasando", en alusión a la trama de corrupción Gürtel, porque, según él, “el PP esté en puertas de gobernar en España”. En este sentido, destacó que "muchos golpes" buscan que la Comunitat Valenciana "se humille", pero advirtió de que no lo hará. Asimismo, instó a los dirigentes y militantes del partido a trabajar con "alegría y entereza" porque, a su juicio, esto implica "tristeza y debilidad" para los "otros".
"No nos iremos porque somos de aquí, como los árboles, los viñedos o las montañas", subrayó y auguró que "la victoria de 2011 será mas dulce, más grande y más vibrante". Camps, que dedicó buena parte de su intervención a criticar a José Luis Rodríguez Zapatero, también defendió su gestión al frente de la Generalitat asegurando que la Comunidad valenciana "merece una medalla mundial interplanetaria" y jactándose de su “no colaboración” con el presidente del Gobierno.
PAJÍN SE PREGUNTA PORQUE CAMPS “ESTÁ TAN FELIZ”
La secretaria de Organización del PSOE, Leire Pajín, ironizó con el estado de ánimo de Camps y dijo no saber “qué celebra Camps” y “por qué está tan feliz cuando Valencia lidera el déficit, el desempleo y el deterioro de los servicios públicos".
La dirigente socialista destacó que ningún miembro de la dirección nacional del PP acuda a la celebración "pero ninguno de ellos se ha atrevido a decirle a Camps que se aparte de la política".
También se refirió a la reprobación de Ángel Luna, el portavoz socialista en las Cortes valencianas esta misma semana, que provocó el abandono del hemiciclo por parte de todos los grupos de la oposición. Comentó al respecto que "esta región es la única de Europa en la que un gobernante con la mayor tasa de desempleo e inmerso hasta el cuello en uno de los mayores casos de corrupción no sólo no da explicaciones ni gobierna, sino que reprueba al portavoz de la oposición".
Ni muchos baños de multitudes ni muchos actos de fe ocultan la difícil situación a la que se enfrenta Francisco Camps después de que el Tribunal Supremo ordenara reabrir la ‘causa de los trajes’ por un presunto delito de cohecho.
Bajo el lema Nosotros cumplimos, el presidente de la Generalitat Valenciana protagonizó este sábado un acto del PPCV de balance de tres años de gestión 'popular' en la Comunitat y de autoafirmación de su liderazgo celebrado en el Palacio de Congresos de Valencia, y en el que participaron los alcaldes de Valencia, Alicante y Castellón, Rita Barberá, Sonia Castedo y Alberto Fabra, respectivamente, así como el presidente del PP de Valencia y de la Diputación provincial, Alfonso Rus.
Como ya viene siendo habitual desde que el Supremo corrigiera la decisión tomada por el Tribunal Superior de Justicia de Valencia de archivar la causa contra Camps, el dirigente valenciano no ha cesado un instante en salir en su propia defensa haciéndose la víctima y descolgándose con frases tales como "Estoy más feliz que ayer, más feliz".
En la misma línea se mostró este sábado en un acto al que no acudió Mariano Rajoy ni ningún dirigente del PP nacional. Las faltas también se hicieron notar por parte del PP de Alicante que preside José Joaquín Ripoll, el mismo que ya le diera plantón en la última junta directiva regional.
Preguntado por la prensa en Lleida donde acudió a una “caracolada”, Rajoy se limitó a decir que él no puede estar "todos los días en todas partes" y que estaba al corriente de los cargos del partido que asisten este sábado al acto de Camps, al tiempo que reiteró su apoyo al presidente valenciano.
Pero Camps, lejos de sentirse aludido por las ausencias, volvió a culpar al Gobierno central y al PSOE de "todo lo que está pasando", en alusión a la trama de corrupción Gürtel, porque, según él, “el PP esté en puertas de gobernar en España”. En este sentido, destacó que "muchos golpes" buscan que la Comunitat Valenciana "se humille", pero advirtió de que no lo hará. Asimismo, instó a los dirigentes y militantes del partido a trabajar con "alegría y entereza" porque, a su juicio, esto implica "tristeza y debilidad" para los "otros".
"No nos iremos porque somos de aquí, como los árboles, los viñedos o las montañas", subrayó y auguró que "la victoria de 2011 será mas dulce, más grande y más vibrante". Camps, que dedicó buena parte de su intervención a criticar a José Luis Rodríguez Zapatero, también defendió su gestión al frente de la Generalitat asegurando que la Comunidad valenciana "merece una medalla mundial interplanetaria" y jactándose de su “no colaboración” con el presidente del Gobierno.
PAJÍN SE PREGUNTA PORQUE CAMPS “ESTÁ TAN FELIZ”
La secretaria de Organización del PSOE, Leire Pajín, ironizó con el estado de ánimo de Camps y dijo no saber “qué celebra Camps” y “por qué está tan feliz cuando Valencia lidera el déficit, el desempleo y el deterioro de los servicios públicos".
La dirigente socialista destacó que ningún miembro de la dirección nacional del PP acuda a la celebración "pero ninguno de ellos se ha atrevido a decirle a Camps que se aparte de la política".
También se refirió a la reprobación de Ángel Luna, el portavoz socialista en las Cortes valencianas esta misma semana, que provocó el abandono del hemiciclo por parte de todos los grupos de la oposición. Comentó al respecto que "esta región es la única de Europa en la que un gobernante con la mayor tasa de desempleo e inmerso hasta el cuello en uno de los mayores casos de corrupción no sólo no da explicaciones ni gobierna, sino que reprueba al portavoz de la oposición".
