viernes. 29.03.2024
CUP

"Mas dijo que no sería un obstáculo y ahora es el momento de demostrarlo. La pelota está en su tejado"

El Consell Polític y el Grup d'Acció Parlamentària (GAP) de la CUP han aprobado este domingo rechazar la investidura de Artur Mas como próximo presidente de la Generalitat, una decisión que aboca Catalunya a tener que celebrar elecciones autonómicas en primavera: la opción de no investir a Mas que se ha impuesto finalmente ha tenido 36 votos a favor, 30 en contra y 1 abstención después del empate de hace una semana en la Assemblea Nacional, donde 1.515 personas votaron 'no' a investir a Mas y 1.515 'sí'.

La CUP ha aclarado dos cifras clave: primero, que los miembros del Consell Polític y el GAP son 67 y no 68 como indicaron en principio; y también que, si hay nuevo pleno de investidura, el 'no' a Mas se traduciría en 10 abstenciones.

Si el Parlament convoca pleno y se llega a la votación, la investidura de Mas fracasaría en ese caso, porque tendría los 62 votos a favor de JxSí, los 63 en contra del resto de grupos, y las 10 abstenciones de la CUP, insuficientes para que vuelva a ser presidente.

El resto de grupos del Parlament ya han avisado a la coalición de Artur Mas (JxSí) de que no tienen ninguna intención de negociar su investidura si la CUP le rechaza, motivo por el cual el Parlament quedaría disuelto el 10 de enero con toda probabilidad, y habría elecciones entre 40 y 60 días después.

La reunión de los anticapitalistas ha durado cinco horas, y, tras constatarse que no había una salida de consenso que pudiera satisfacer a todos los sectores de la CUP, finalmente se ha celebrado una votación ajustada en la que se impuesto el 'no' a Mas.

La organización ha hecho un esfuerzo para lograr una propuesta de consenso y se han llegado a debatir hasta seis escenarios diferentes buscando uno que aunara a todos las sensibilidades, pero finalmente se ha tenido que llegar a una votación ante la falta de una opción que diera satisfacción a todos.

Ahora se abren varios interrogantes: el primero, si habrá pleno de investidura, ya que JxSí -con mayoría en la Mesa del Parlament- podría decidir directamente no convocarlo, a sabiendas de que no obtendrá el apoyo necesario.

El segundo movimiento posible es que JxSí acceda a relevar a Mas como candidato para que la CUP reconsidere su posición, pero esto se presenta como algo prácticamente imposible ya que la coalición de Artur Mas ha afirmado en varios ocasiones que esta era una cuestión innegociable. Si aun así hubiera un cambio de candidato, este tendría que producirse en cuestión de 24-48 horas, ya que los plazos para investirlo son cada vez más cortos, porque la ley fija el 10 de enero como límite para que haya una investidura.

De hecho, el diputado de la CUP en el Parlament Sergi Saladié ha retado a Mas a retirarse y proponer otro candidato de JxSí para que haya investidura. "Mas dijo que no sería un obstáculo y ahora es el momento de demostrarlo. La pelota está en su tejado", ha declarado en la rueda de prensa posterior a la votación.

En el mismo sentido, la diputada de la CUP en el Parlament Gabriela Serra ha advertido de que JxSí aún tiene unos días para plantearles un nombre alternativo a Mas: "Quien quiera mover pieza aún tiene días. No está convocado nada". También ha asegurado que, en caso de que JxSí aceptara este cambio y propusiera otro candidato, la CUP podría reunir a sus órganos "cuando hiciera falta" para pronunciarse y decidir si da luz verde al nuevo candidato.

También está por ver cuál es el futuro de la CUP como formación política, ya que está integrada por varios movimientos y corrientes que han mostrado abiertamente divididos en todo el proceso interno de debate sobre si se tenía que investir a Artur Mas o no.

En este sentido, la diputada Serra ha negado que la división interna que ha evidenciado la formación en sus debates de los últimos días ponga a la CUP en riesgo de fractura: "Queda CUP para mucho tiempo. Encaramos el futuro con convicción".

La CUP reta a Artur Mas a retirarse y proponer otro candidato para que haya investidura