miércoles. 24.04.2024

Paso lento, pero constante. Ese el principal análisis que se puede extraer tras constatar que por sexto trimestre consecutivo el índice de confianza del consumidor elaborado por Nielsen creció en España hasta alcanzar los 61 puntos. Este dato muestra que la opinión de los españoles sobre la economía ha mejorado levemente y que los mensajes sobre el fin de la crisis tienen ya un fiel reflejo en la percepción ciudadana sobre la situación global del país.

No obstante, más del 65% no tiene buenas perspectivas sobre sus finanzas personales para los próximos doce meses

De hecho, a lo largo de los últimos doce meses, el índice de confianza del consumidor elaborado por la consultora Nielsen arroja una evolución positiva de 14 puntos. Eso sí, estos niveles de confianza en España se sitúan a día de hoy en 61 puntos, cifra todavía muy inferior a la media europea que registra 75, muy alejada de países como Alemania (99) o Reino Unido (87).

Estos datos se desprenden del Índice Global de Confianza del Consumidor relativo al primer trimestre de 2014, elaborado por Nielsenen 60 países de todo el mundo, incluido España. En este informe se pone de manifiesto que la situación de la economía es la principal preocupación para los españoles seguido del empleo. En este sentido se perciben tímidas mejorías respecto a la intensidad con la que estos problemas afectan a la mayoría de los ciudadanos. Además, el precio de las facturas energéticas, la sanidad y la educación completan las cinco inquietudes más importantes para la ciudadanía.

Aunque sea poco a poco y con pasos cortos algo está cambiando en la mentalidad de los españoles respecto a la crisis. De hecho, un 81% de los encuestados asegura que el país está en recesión, cuatro puntos porcentuales menos que hace tres meses. Este dato nos acerca a la media europea en donde un 69% asegura que la economía se encuentra en esa situación. En cambio otros países de nuestro entorno registran peores ratios. En Italia un 95% de sus ciudadanos considera que están en recesión. Incluso en Francia, donde la perspectiva económica es sensiblemente mejor que la española, un 84% de los encuestados declara que el país sufre esa realidad.

Lo que no parece haber cambiado a positivo, sino más bien todo lo contrario, es el tiempo que tardará nuestra economía en abandonar la crisis, ya que tan sólo un 10% de los españoles piensa que el país saldrá de esta situación en los próximos 12 meses, tres puntos porcentuales menos que en el anterior trimestre.

En esta línea, un indicador que muestra cómo todavía queda cierto camino por recorrer para salir de la actual crisis es el del uso que le dan los españoles al dinero sobrante, una vez pagados los gastos básicos como alimentación o vivienda. Tan sólo han aumentado sus posiciones la partida dedicada a vacaciones y la de aquellos a los que no les queda dinero sobrante para gastar.

¿Cómo ahorran los españoles?

Otra cifra que no ha variado en los últimos tres meses es que el 77% de los consultados en España considera que los próximos doce meses todavía serán malos para comprar, señal inequívoca de las expectativas de consumo de la ciudadanía se mantienen y que su actitud de contención en el gasto sigue  muy presente.

Buena prueba de ello reside en que, según el informe elaborado por Nielsen, un 67% de los españoles prefieren renunciar al ocio fuera de casa y un 66% reducir las facturas de gas y electricidad como principales medidas de ahorro. Estas actitudes además, han calado profundamente en la ciudadanía ya que un 48% de los encuestados asegura que mantendrá esa actitud de ahorro en los costes energéticos una vez que haya concluido la crisis. En este sentido un 31% declara que usará menos el coche y un 25% seguirá recortando el ocio fuera de casa.

Mejores perspectivas

Una de las razones por las que la percepción general de los españoles mejora tiene que ver con sus finanzas personales. Pese a que los ratios de los ciudadanos españoles están todavía alejados de la media europea, se observa una mejoría de cinco puntos porcentuales respecto al anterior trimestre. De esta manera un 66% de ciudadanos considera sus perspectivas financieras para los próximos doce meses como malas o no muy buenas, frente al 77% que se declaraba en la misma situación hace tres meses.

También avanza en cuatro puntos porcentuales las impresiones de los españoles respecto al trabajo, ya que en el último trimestre de 2013 un 85% de los ciudadanos consideraba como mala o no muy buena su situación laboral en el corto plazo, mientras que en el primer trimestre de 2014, esa cifra bajó hasta el 81%.

Según el director general de Nielsen España, Gustavo Núñez, “pese a la evidente mejora en la percepción de los consumidores sobre el empleo, aún nos queda un largo camino por recorrer en esta materia. Que se reduzcan los niveles de desempleo es esencial para la recuperación de la demanda interna y la reactivación del consumo, cuya evolución positiva será el síntoma definitivo de que España ha salido de la crisis”.

La confianza del consumidor vuelve a crecer en España hasta los 61 puntos, según Nielsen