sábado. 20.04.2024
LA NUEVA ERA RAJOY PONE A LA PRESIDENTA MADRILEÑA CONTRA LAS CUERDAS

Aguirre comienza su penitencia ‘marianista’

Esperanza Aguirre se ha visto obligada a mover ficha tras la aplastante victoria de Rajoy el 20N, el mismo Rajoy al que la ‘lideresa’ cuestionó en el pasado en varias ocasiones. La presidenta madrileña comienza a lavar los trapos sucios de su partido, el PP de Madrid, que ha manejado hasta ahora con mano de hierro y a su antojo. La primera cabeza que ha rodado ha sido la de Francisco Granados, presunto cerebro del espionaje político que tuvo como víctimas, entre otros, al número dos de Gallardón, el vicelacalde Manuel Cobo. En el PP victorioso de la era ‘marinista’ comienzan las venganzas y no se cobran precisamente en plato frío. Hay incluso quien dice que Aguirre prepara su sucesión, dispuesta a retirarse del primer plano político. 

La presidenta regional y del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, ha justificado el relevo de Francisco Granados como secretario general alegando que hace falta un "nuevo impulso" en el partido para apoyar al Gobierno de Mariano Rajoy, aunque ha dicho que Granados ha desarrollado su tarea "admirablemente bien".

"Me he enterado media hora antes del comité ejecutivo de que iba a proponer mi sustitución"

Aguirre ha hecho estas declaraciones al salir de la sede del PP en la calle Génova, tras la reunión del Comité Ejecutivo Regional del partido, que esta tarde ha aprobado por unanimidad que el nuevo secretario general de los populares madrileños sea desde ahora Ignacio González, también vicepresidente del Gobierno autonómico.

La presidenta ha comunicado a Granados su cese media hora antes de la reunión, y ha propuesto a González como sustituto.

"Es un relevo normal en la Secretaría General", ha asegurado Aguirre, que ha recordado que esta medida se tendría que haber adoptado en un congreso del PP de Madrid tras las elecciones autonómicas de mayo, pero que el cónclave se ha retrasado a consecuencia de las elecciones generales.

A la pregunta de si la "falta de confianza" sobre Granados es lo que ha motivado su destitución -tal y como apuntaban las primeras informaciones-, se ha limitado a reiterar que nos encontramos ante un "momento nuevo" y "delicado", en el que el partido necesita "un nuevo impulso".

El Gobierno de Rajoy, ha continuado, necesitará "el apoyo y respaldo entusiasta de todos", y aunque Granados "ha desarrollado admirablemente bien el papel de secretario general durante siete años", ahora toca "renovar", y la persona indicada para dirigir al partido es Ignacio González.

Junto con González, encabezarán la dirección del PP de Madrid Javier Fernández-Lasquetty (vicepresidente de Acción Política), Gador Ongil (vicesecretaria de Organización), y Bartolomé González (presidente del Comité Electoral, cargo hasta ahora ocupado por Ignacio González).

La presidenta madrileña comunicó su decisión la misma tarde del miércoles a Granados, que a las 18 horas estaba sentado a su lado mientras Aguirre presidía el primer Comité Ejecutivo del PP madrileño después de las elecciones generales celebradas el pasado domingo.

Granados, que durante la pasada legislatura ocupó la Vicepresidencia del Gobierno y la Consejería de Presidencia, Justicia e Interior, ya salió del Ejecutivo autonómico después de las elecciones del pasado mes de mayo, cuando rechazó ser portavoz del Grupo Popular en la Asamblea. 

Su nombre estuvo mucho tiempo salpicado por la trama de espionaje político en la Comunidad de Madrid, una de cuyas víctimas fue el número dos de Alberto Ruiz-Gallardón, el actual vicelacalde Manuel Cobo. 

Granados aseguró que sale con "la cabeza muy alta" porque cree que ha dado "lo mejor" de sí mismo y ha agradecido a la presidenta madrileña su "confianza" durante todos estos años en los que ha estado a su lado.

Granados ha sido de los primeros en abandonar el comité ejecutivo del PP de Madrid, donde se ha votado por unanimidad que sea el vicepresidente y portavoz del Gobierno, Ignacio González, el nuevo secretario general del partido, y ha explicado ante los medios, a su salida, que se ha enterado "media hora antes de empezar" la reunión.

"Me he enterado media hora antes del comité ejecutivo de que iba a proponer mi sustitución, y lo único, como he dicho en el comité, agradecer a la presidenta muy sinceramente todos los nombramientos que he tenido durante estos años como consecuencia de su decisión, tanto en el gobierno como en el partido como secretario general. Estoy eternamente agradecido y lo estaré siempre", ha dicho.

En este sentido, ha asegurado que sale de la Secretaría general "con la cabeza muy alta". "Creo sinceramente que he dado lo mejor de mí mismo durante estos años, que se han obtenido los mejores resultados del partido en la Comunidad y en consecuencia muy satisfecho del trabajo que he hecho y del cese", ha añadido.

Preguntado por si la razón ha sido la pérdida de confianza, tal y como han apuntado fuentes populares a Europa Press, Granados ha señalado que la presidenta no le ha manifestado eso ni en el comité ha dicho nada al respecto. La idea es "que se abre una nueva etapa como consecuencia del resultado de las elecciones generales", ha explicado.

Esto, ha continuado, "supone que el partido en Madrid debe tener otro impulso y que en consecuencia piensa que la persona indicada para esta nueva etapa es Ignacio González". "Estoy de acuerdo con que es así", ha sentenciado Granados, que no ha perdido la sonrisa en ningún momento ante las cámaras.

Aguirre comienza su penitencia ‘marianista’