En nuestro país, desde 1980 se han ido promulgando nuevas leyes y normas para mejorar los requisitos de calidad y aislamiento en las viviendas, culminando con el ambicioso Código Técnico de Edificación aprobado en 2006. Sin embargo, desde ese año justamente la construcción de viviendas ha disminuido drásticamente, de tal manera que la inmensa mayoría del parque de viviendas no cuenta con los avances que se contemplan en esa normativa. Por otro lado, se calcula que si se aplicase el CTE a todo el parque de viviendas se ahorraría en todo el territorio nacional un 30% de energía: el equivalente a 5.000 millones de euros.
No obstante, debido al deterioro del mercado laboral muchos hogares españoles no sólo no disponen de capacidad de inversión para rehabilitar sus viviendas, sino que ni siquiera pueden permitirse mantenerla en condiciones de confort, lo que viene llamándose en estos tiempos “pobreza energética”.
Para cumplir los objetivos de ahorro energético que nos exige los tratados internacionales y dotar a las familias españolas de condiciones de vivienda dignas, desde CCOO defendemos que hace falta aunar voluntades y establecer una hoja de ruta consensuada entre administraciones, patronales y sindicatos, que se plasme en un documento de trabajo ambicioso a nivel estatal, y que incluya una planificación integral a corto, medio y largo plazo con objetivos cuantificados para rehabilitar el parque de viviendas anterior a 1980 y que se estima en casi 14 millones de hogares en todo el territorio.
De la misma forma, defendemos la sustitución total de los combustibles fósiles en la industria cementera por la valorización energética de residuos. Para cumplir este objetivo debe existir un compromiso patente, visible y manifiesto de todas las administraciones que incluya la creación de centros de reciclaje que alcancen al 100% de los residuos que generamos para poder eliminar los vertederos.
Igualmente, por su compromiso con la causa medioambiental, CCOO de Construcción y Servicios, junto con otros sindicaos europeos, está liderando un proyecto aprobado por la Comisión Europea cuyo objetivo principal es el fortalecimiento de la capacidad de los interlocutores sociales de contribuir al diálogo social europeo y nacional en relación con el desarrollo de la construcción verde dentro de una economía sostenible.
En definitiva, aprovechamos esta fecha señalada para señalar que es urgente reinventar el sector de la construcción, promoviendo la creación de un sector puntero y avanzado, que contribuya a una economía competitiva, al bienestar social y que promueva empleos estables y de calidad.
