martes. 16.04.2024

fedeaUna de las funciones principales de la prensa es, a mi modo de ver, la de ayudar a formar una ciudadanía más crítica, base indispensable de cualquier democracia. Esto es, una ciudadanía capaz de deconstruir e interpretar las informaciones que recibe.

Mal cumple el periodismo con ese fin si cae en las trampas que constantemente le tienden quienes sacan provecho de la información que se consume sin saborear, de la bulimia informativa. Mal cumple su función si no se pregunta, al menos, cui bono. Es decir, a quién beneficia que se publique esta noticia.

Entre las trampas que tienen quienes sacan provecho de las noticias recibidas acríticamente, una de las más viejas es la de constituir una fundación, centro de estudios o barómetro que con apariencia de objetividad y frecuentemente oculto tras unas siglas que rezumen neutralidad y prestigio, diga lo que nosotros —empresa, lobby o partido— no podemos decir abiertamente. Bien porque no nos conviene, bien porque seríamos menos creíbles.

Viene esto al caso por una noticia que ha tenido gran difusión en los últimos días en periódicos y televisiones de toda España. Noticia que decía lo siguiente: “Fedea —así, sin explicar las siglas—estima que ni el pleno empleo garantiza las pensiones a largo plazo”.

La noticia no puede ser más alarmante, y muchos las han utilizado, incluso, para señalar la inutilidad de la respuesta del gobierno a la crisis de las pensiones. Pues el gobierno siempre ha fiado la sostenibilidad de las pensiones al crecimiento del empleo.

Lo que la noticia no decía, y ningún periodista se ha preguntado (que yo sepa) es quién es Fedea y ante quien responde. Veámoslo.

Fedea son las siglas de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada. Como ven, un nombre muy neutro y de aparente objetividad. Pero si repasamos la lista de patronos, es decir, de pagadores de Fedea, nos encontramos a: Abertis, Banco Popular, Banco Sabadell, BANKIA, BBVA, Corporación Financiera Alba, S.A., La Caixa, Santander, Fundación Ramón Areces, etc.

Es decir, detrás de Fedea hay una serie de bancos e instituciones neoliberales que nos hacen sospechar, o nos deberían hacer sospechar de las noticias emitidas por este Think Tank —pues eso es realmente— que bajo su aparente objetividad, incluyen una buena dosis de ideología ultraliberal.

Uno, que es mal pensado, sospecha que todo este alarmismo en torno a las pensiones no busca informar, sino que es una estrategia de Marketing destinada a una modificación del sistema —vía pensiones nocionales, o vía debilitación de otro tipo del modelo actual— que permita ampliar el número de personas potencialmente interesadas en adquirir un plan de pensiones privados. Porque el público no sea suficiente para garantizar una vejez digna.

O dicho de otro modo: como parece que la confianza del español medio en el sistema público de pensiones es todavía alta. Y se empeña en no abrirse un plan privado, conviene sacudir el marcado con informaciones como ésta, que a base de crear incertidumbre y miedo, movilice al consumidor hacia las sucursales, donde le espera un bonito plan de pensiones con sus correspondientes comisiones y costes.

Pero esto lo pienso yo que, como decía, soy un mal pensado. Y hasta un cínico. Porque seguro que a los bancos que hay detrás de este Think Tank sólo les mueve el bienestar de los españoles. Y no la codicia.


Alberto Gómez Vaquero | Doctorado en Periodismo por la UCM y profesor asociado de la Universidad de Toulouse. 

'Cui bono': o por qué hay que sospechar de las noticias alarmantes sobre las pensiones