sábado. 20.04.2024
CORTE-Y-RECORTE-205

Bajo el título del libro 'Madrid, corte y recorte', su autor, el profesor y periodista Ramón Hernández de Ávila hace un recorrido histórico y anecdótico por los años del nuevo régimen democrático en los ayuntamientos. Partiendo del primer alcalde democrático, el Viejo Profesor, Enrique Tierno Galván, con el que colaboró directamente hasta su defunción, retrata los seis alcaldes con los que ha convivido desde entonces hasta Ana Botella. Más de una treintena de años formando parte del Gabinete de Prensa, le da pie al autor para reflexionar sobre la degradación democrática que han vivido los ayuntamientos, y el país en general. No en vano el subtítulo del libro reza así: “Historia de la DemoGracia Municipal”, tachada la “c” de democracia, para expresar gráficamente tal degeneración. En las 800 páginas del volumen habla de los chanchullos de “corte y confección” que se han montado, de la venta fraudulenta de empresas públicas, del desvío de fondos públicos y europeos, del derroche en obras inútiles, de la degradación y desigualdades en la capital del reino, de los manejos por conseguir poder, del tamayazo y del espionaje en la Comunidad de Madrid, así como de otras anécdotas y curiosidades de las que el autor ha sido testigo.

Mantiene que la corrupción democrática empieza en los municipios, la Casa Consistorial y acaba en la Casa Real, y hace un recorrido por las tramas y corruptelas que han salpicado también al Ayuntamiento de Madrid, como la red Gürtel, la Brugal, la Operación Guateque, etc. Habla sin pelos en la lengua y explica el enriquecimiento de algunos ediles, y la lucha por el poder en los dos partidos que han gobernado el ayuntamiento, reflejo de las intrigas y corrupciones que se han extendido por toda España.

Una historia de la democracia contada de manera ágil, divertida a veces, jocosa otras, y sincera siempre. Un libro que demuestra que la corrupción ha llevado a la crisis, y con la disculpa de la crisis se ha deteriorado la vida social y los servicios públicos. He ahí la razón del título, una capital que es Corte, y ahora es también capital del recorte.

Madrid, corte y recorte