Un accidente de tráfico es sin duda la peor de las experiencias que podemos vivir en la carretera, especialmente en los casos en los que estos no se resuelven de forma amistosa. Incluso en este supuesto, después del accidente tendremos que lidiar con las compañías de seguros, un proceso que puede suponernos más de un quebradero de cabeza según cuáles sean las características de nuestro caso particular.
Es necesario destacar, dentro de estas situaciones que pueden prolongar en el tiempo nuestro calvario más allá del mero momento del accidente, aquellas en las que es necesario interponer algún tipo de reclamación debido a la necesidad de rehabilitación tras el accidente. En estos casos, a los dolores que podamos estar padeciendo en el momento, quizá nos toque sumar la incertidumbre de saber cómo, dónde y, sobre todo, cuándo podremos acceder a un tratamiento que cubra el seguro y que nos permita el poder continuar con nuestra vida de forma normal lo antes posible.
Es por eso que, ante una perspectiva de accidente de tráfico en la que hemos sufrido algún tipo de lesión, tengamos a nuestra disposición los mejores servicios y profesionales que nos permitan realizar una reclamación y obtener la indemnización buscada en el menor tiempo posible.
Solicitar una indemnización después de un accidente
Es frecuente que, después de un accidente de tráfico, suframos algún tipo de secuelas derivadas de este suceso. Los latigazos cervicales y lesiones de tipo muscular suelen ser las más frecuentes en los distintos tipos de accidentes, pudiendo revestir mayor o menor gravedad según cada caso particular. Este tipo de lesiones se pueden ver agravadas con el paso del tiempo, así es que debemos hacer todo cuanto esté en nuestra mano para ponerles solución lo antes posible.
Si nunca hemos sufrido un accidente anteriormente, quizá una guía para cobrar la indemnización nos sea de gran utilidad a la hora de conocer cuáles son los primeros pasos que tenemos que realizar a la hora de reclamar y calcular la indemnización que debemos solicitar al seguro. Esos primeros consejos si hemos sufrido un accidente de tráfico nos orientarán y nos otorgarán una idea más concreta acerca de un proceso que puede resultar complejo en determinadas ocasiones.
Interponer una reclamación de indemnización por accidente de tráfico, si bien es laborioso, no tiene por qué quitarnos demasiado de nuestro tiempo. Actualmente podemos encontrar diversos servicios, como FM Abogados, en los que se encargarán de realizar todos los trámites necesarios para que nuestra reclamación no sólo llegue a buen puerto, sino que lo haga de la manera más rápida posible. El contar con profesionales que lleven nuestro caso y nos asesoren en todo momento, ya sean de FM Abogados o de otro servicio, es imprescindible si queremos garantizar el éxito de nuestra reclamación con la solución más satisfactoria y ajustada a nuestro caso particular.
Los beneficios de una buena rehabilitación
Son frecuentes los casos en los que a los accidentados se nos asigna por defecto una rehabilitación por parte de la aseguradora gracias a los diferentes convenios y acuerdos que esta tiene con clínicas o especialistas del sector. Sin embargo, en muchas de estas ocasiones la experiencia resulta ser nefasta, ya que el trato recibido no se adapta a las necesidades particulares de cada cliente y el interés principal no es ofrecer la mejor solución, sino la más rápida para terminar el proceso cuanto antes y poder continuar atendiendo a otros afectados.
A la hora de acceder a una rehabilitación, en el caso de que la necesitemos, debemos conocer exactamente cuáles son exactamente las clínicas concertadas de rehabilitación que tenemos disponibles en nuestra zona, ya que todas ellas son aptas para que nosotros podamos escogerlas para realizar allí el tratamiento, no teniendo que resignarnos a llevarla a cabo donde el seguro estipule. Para que esto sea afectivo, el centro de rehabilitación escogido debería tener un programa mediante el cual nos ayude con todos los trámites necesarios para poder realizar la rehabilitación en dicho centro y no en el que se nos asigna en un principio.
Las lesiones ocasionadas en estos accidentes afectan a zonas en su mayoría delicadas, por lo que es de gran importancia que el tratamiento no sea únicamente rápido, sino que debe primar la eficiencia del mismo. Una buena solución desde un primer momento nos podrá ahorrar futuros dolores o lesiones derivadas de esta en un futuro.
