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Con prácticamente el cien por cien del voto escrutado, el PP ha ganado las elecciones en Galicia al obtener 40 escaños en el Parlamento gallego, dos menos que en las elecciones de 2020 con Alberto Núñez Feijóo de candidato. Revalida así mandato con mayoría absoluta, fijada en 38 parlamentarios de un total de 75 y podrá seguir gobernando en solitario. Por quinta vez, los populares mantienen el feudo gallego en las primeras elecciones con el candidato Alfonso Rueda que tomó el relevó a Feijóo a mitad de legislatura. Los populares mantienen una mayoría holgada en Galicia lo que refuerza la figura de Feijóo como líder del partido en una campaña marcada en buena parte por la política nacional.
El BNG se mantiene como segunda fuerza política, pero crece significativamente. La candidata Ana Pontón cosecha más votos qie en los anteriores comicios pasando de 19 a 25 parlamentarios, 6 más que en las elecciones de 2020. El Bloque capitaliza así el voto de la izquierda no nacionalista que ha dejado fuera a Sumar y Podemos al no lograr el 5% de voto necesario para obtener representación. Tampoco ha logrado representación Vox.
El PSdG ha sido el gran perdedor de estos comicios. Su candidato, José Ramón Gómez Besteiro, no ha conseguido siquiera mantener los 14 escaños logrados hace cuatro años. Pierde cinco parlamentarios y se mantiene como tercera fuerza política en la cámara gallega.
Democracia Ourensana entra el Parlamento gallego con un escaño. Esta ha sido una de las grandes sorpresas de la noche que rompe la tónica general de este parlamento en la que estarán representadas cuatro fuerzas políticas en lugar de tres.
Del total del voto CERA, ha votado el 6,15% del censo, 29.300 papeletas que se recontarán a partir del 26 de febrero.
