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Cuando en el año 2000 la dirección del diario El Mundo encargó al periodista Manuel Sánchez ocuparse de cubrir al PSOE se sintió contrariado y un tanto a disgusto. Creía por aquel entonces que la información política no era lo suyo y temía no ser muy bien recibido en las filas socialistas después de haber publicado algunas noticias del ámbito judicial que incomodaron bastante en Ferraz. Él mismo lo cuenta en su libro ‘Zapatero, el legado progresista’, cuya presentación, este martes en el Ateneo de Madrid, concitó el interés de buena parte de la profesión y de destacados socialistas.
Veinte años después del comienzo de esa andadura, Manu (para los amigos) recopila toda esa experiencia vivida en una elaborada crónica periodística de la etapa de José Luis Rodríguez Zapatero justo cuando se cumple el veinte aniversario de su victoria en las urnas, el 14 de marzo de 2004. En un momento en que el expresidente del Gobierno ha reaparecido con fuerza para reivindicar su legado y apoyar sin fisuras a Pedro Sánchez, este libro da cuenta del quehacer político de aquellos años, con sus luces y sus sombras, con mucha información y muchos datos y con testimonios muy vivos de dirigentes de esa etapa, que han rememorado sus recuerdos con el periodista en más de 30 horas de "conversaciones informales”, incluido el propio Zapatero.
La periodista Esther Palomera y José Bono acompañaron a Manuel Sánchez en el acto de presentación al que acudió la ministra Pilar Alegría, diputados socialistas y los líderes sindicales Unai Sordo y Pepe Álvarez, entre otros. En un plano más discreto se pudo ver a José Blanco, cuyo papel como secretario de Organización del PSOE tras el Congreso socialista que aupó a Zapatero a la Secretaría General está narrado en el libro. En el recuerdo quedaron otros dirigentes tristemente desaparecidos como Alfredo Pérez Rubalcaba, Carme Chacón, Antonio Alonso, Pedro Zerolo o Txiki Benegas. Todos ellos contribuyeron a dar forma y poner en práctica un mandato que se significó por los avances en derechos y libertades y en la lucha por la igualdad, con la aprobación de leyes tan importantes como la primera norma contra la violencia machista, la ley del matrimonio homosexual, la ley de plazos para el aborto, la ley antitabaco, la ley de dependencia, la ley de memoria histórica…; un “legado progresista” que para el autor del libro ha acabado asumiendo con total naturalidad la ciudadanía española en las dos últimas décadas y eso pese a la brutal cruzada emprendida por la derecha del PP y la cúpula de la Conferencia Episcopal con manifestaciones en las calles día sí y día también.
Los atentados del 11-M y la victoria socialista en aquellas elecciones tras unos días convulsos de ignominiosas mentiras del Gobierno Aznar alumbraron un nuevo tiempo político en España. Zapatero se estrenó en el cargo con la retirada de las tropas de Irak comandada por el propio José Bono como ministro de Defensa. El expresidente castellanomanchego cuenta en el libro jugosas anécdotas de aquel momento y cómo se las tuvo que arreglar frente al rocoso Rumsfeld para explicar una decisión que daba cumplimiento al compromiso electoral de su ya jefe de filas y su “no a la guerra”. La presencia de Bono en el Ateneo y su intervención en la presentación del libro de Manuel Sánchez no dejó indiferente a nadie, no solo por poner en valor las políticas llevadas a cabo en los siete años de mandato de Zapatero y sus once como secretario general del partido, sino también por su apoyo sin fisuras a Pedro Sánchez, pese a las discrepancias, que haberlas haylas, sobre todo cuando se abordan temas tan espinosos como la cuestión territorial; antes el Estatut, ahora la amnistía; pero no está él para dar artillería a la derecha contra su partido al que le debe todo, dejó meridianamente claro.
Luces y sombras decíamos. El libro de Manuel Sánchez narra el proceloso tiempo del Estatut de Catalunya que para muchos encendió la mecha del procés. No para Zapatero que así lo hace constar en su conversación con el periodista. Tampoco sombras en el proceso de negociación abierto con ETA y que culminó con el cese definitivo de la actividad armada de la banda un 20 de octubre de 2011. Un legado, este también, que el exlíder socialista está poniendo en valor estos últimos tiempos: “Sí, fue mi Gobierno. Bajo mi Gobierno se entregó ETA”, ha afirmado en más de una ocasión. Y más sombras que luces con el tsunami de la crisis económica que hizo saltar por los aires al gobierno socialista, el asunto que más cicatrices dejó a Zapatero y por el que el PSOE hizo penitencia largos años.
El libro de Manu es una excelente crónica periodística rigurosa y veraz. Un libro para los más jóvenes de la profesión que se aventuren ahora en la difícil tarea de la información política. Un trabajo que pone en valor la libertad de prensa y el poder conocer de primera mano por parte de la ciudadanía la trastienda de una etapa de Gobierno que dejó huella y legado, ‘el legado progresista de Zapatero', que debería quedar en la memoria colectiva.
Zapatero, el legado progresista | Manuel Sánchez | Ediciones B | Madrid, Marzo de 2024. | 21,90 €. COMPRA ONLINE
